sábado, 4 de febrero de 2023

Letanías por los Sacerdotes

  


Señor, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros.
 
Cristo, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros. 
 
Señor, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros. 
 
Cristo, óyenos.
Cristo, óyenos.  
 
Cristo, escúchanos.
Cristo, escúchanos. 
 
Dios Padre Celestial,
ten piedad de nosotros.
 
Dios Hijo Redentor del mundo,
ten piedad de nosotros.
 
Dios Espíritu Santo,
ten piedad de nosotros.

Santa Trinidad, un solo Dios,
ten piedad de nosotros.

Santa María, Madre de los sacerdotes,
ruega por nosotros.

Por el Papa, vicario de Cristo,
óyenos, Señor, y ten misericordia.
 
Por todos los cardenales de la Santa Iglesia de Dios,
óyenos, Señor, y ten misericordia.
 
Por todos los obispos de la Santa Iglesia de Dios,
óyenos, Señor, y ten misericordia.
 
Por todos los sacerdotes de la Santa Iglesia de Dios,
óyenos, Señor, y ten misericordia.
 
Por todos los diáconos de la Santa Iglesia de Dios,
óyenos, Señor, y ten misericordia.
 
Por todos los seminaristas de la Santa Iglesia de Dios,
óyenos, Señor, y ten misericordia.
 
Por todos los ministros de la Santa Iglesia de Dios,
óyenos, Señor, y ten misericordia.
 
Por los sacerdotes fieles a sus votos,
Sangre preciosa de Jesús, fortalécelos.
 
Por los sacerdotes que se esfuerzan en pos de la santidad,
Sangre preciosa de Jesús, fortalécelos.
 
Por los sacerdotes reverentes con la liturgia,
Sangre preciosa de Jesús, fortalécelos.
 
Por los sacerdotes ortodoxos en la doctrina,
Sangre preciosa de Jesús, fortalécelos.
 
Por los sacerdotes valerosos en la predicación,
Sangre preciosa de Jesús, fortalécelos.
 
Por los sacerdotes magnánimos en la Confesión,
Sangre preciosa de Jesús, fortalécelos.
 
Por los sacerdotes entregados a las obras de misericordia,
Sangre preciosa de Jesús, fortalécelos.
 
Por los sacerdotes desorientados,
Sangre preciosa de Jesús, consuélalos.
 
Por los sacerdotes desmoralizados,
Sangre preciosa de Jesús, consuélalos.
 
Por los sacerdotes agotados,
Sangre preciosa de Jesús, consuélalos.
 
Por los sacerdotes a los que nadie aprecia,
Sangre preciosa de Jesús, consuélalos.
 
Por los sacerdotes calumniados,
Sangre preciosa de Jesús, consuélalos.
 
Por los sacerdotes perseguidos,
Sangre preciosa de Jesús, consuélalos.
 
Por los sacerdotes silenciados,
Sangre preciosa de Jesús, consuélalos.
 
Por los sacerdotes abusadores,
Sangre preciosa de Jesús, lávalos y conviértelos.
 
Por los sacerdotes ambiciosos,
Sangre preciosa de Jesús, lávalos y conviértelos.
 
Por los sacerdotes irreverentes,
Sangre preciosa de Jesús, lávalos y conviértelos.
 
Por los sacerdotes herejes,
Sangre preciosa de Jesús, lávalos y conviértelos.
 
Por los sacerdotes cobardes,
Sangre preciosa de Jesús, lávalos y conviértelos.
 
Por los sacerdotes resentidos,
Sangre preciosa de Jesús, lávalos y conviértelos.
 
Por los sacerdotes tibios,
Sangre preciosa de Jesús, lávalos y conviértelos.
 
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo,
libra y salva a tus sacerdotes.
 
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo,
sana y haz puros a tus sacerdotes.
 
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo,
multiplica el número de tus sacerdotes santos.
 
Levántate, Señor, y ven a tu morada, Tú y el arca de tu majestad,
Vístanse tus sacerdotes de justicia y exulten tus piadosos.
 
Oremos: Señor Jesucristo, ten piedad de tu Iglesia y haz resplandecer sobre nosotros la luz de tu rostro, para que los que habitamos en un valle de tinieblas nos libremos de los males que nos afligen, y nos des numerosos pastores que sean de tu agrado y guíen santamente a tu rebaño a pastos de gracia y gloria donde habitas y reinas con el Padre en unidad del Espíritu Santo, Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

 



***


Para más letanías, ver el ÍNDICE.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Letanías a Nuestra Señora de la Merced

  Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros.   Cristo, ten piedad de nosotros. Cristo, ten piedad de nosotros.     Señor,...